Fue una revolución. Han pasado 50 años y sigue siendo uno de los motores del valle.
En febrero de 1970 se funda Panticosa Turística S.A. y se inauguran 3 remontes. Dos telesillas, Santa Cruz y Petrosos, y un telesquí, Fobas I. La puesta en marcha de los remontes, así como la fundación de la Escuela de Esquí de Panticosa en el mismo año, revolucionarían la vida de la zona.

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El inicio vino de la valentía de un grupo de panticutos y maños, y su visión de apostar por un proyecto que transformaría la vida de los habitantes de Panticosa, que cambiaría de una forma de vida basada en la ganadería y la agricultura al sector terciario, el del turismo. No era novedad, ya que la población ya era experta en el trato a turistas provenientes de alrededor del globo, que venían a visitar el Balneario de Panticosa.

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A finales de los años 70, Formigal S.A. adquiere Panticosa y en el año 1983 se coloca el telesquí Mandilar.  La historia de Panticosa no es historia sin la dedicación de los oriundos del pueblo, que contribuyeron con todo lo que pudieron para que estas ampliaciones se llevaran a cabo.

La década de los 90 es una década de cambiosya que con la llegada de los primeros cañones de innivación artificial, se afianza la prosperidad económica por la que se había apostado. Además, Ibercaja y el Gobierno de Aragón asumen la gestión de la estación y se pone en marcha el plan de ampliación hacia el valle de Sabocos, con tres telesillas de 4 plazas, dos biplaza y un telesquí. El proyecto de expansión concluye con la adquisición de la telecabina, que a día de hoy es un símbolo de la estación.

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La entrada al nuevo milenio comienza, en 2001, con la incorporación de Panticosa al Grupo Aramón y, en 2004, con la construcción de 3 cintas para debutantes.  En la década de los 2010s tiene lugar la unión de Formigal con Panticosa y se inaugura la pista Estrimal, que permite bajar esquiando hasta el pueblo. Han sido años y años de trabajo, de ilusión por esquiar hasta casa y de orgullo por una estación impulsada por los propios vecinos. De tres remontes iniciales, ha pasado a 35 kilómetros de pistas, a tener un símbolo como la telecabina, a ser la estación de referencia para muchos escolares de la provincia, el lugar donde han dado sus primeros pasos, y a ofrecer 1.100 metros de desnivel (desde la bandera hasta el pueblo) para poner a prueba hasta los más pros.

Celebremos juntos los 50 años de dedicación, de esquí, de turismo de montaña y de pasión por la nieve.